Dentro de una empresa existen una serie de elementos que resultan imprescindibles en el desarrollo diario de la jornada laboral. Desde materiales de papelería como bolígrafos, papel, bandejas de sobremesa, etc., hasta los sellos para oficina.
Los sellos en las empresas no son obligatorios, pero sí es muy recomendable contar con ellos, debido a que son elementos muy útiles que nos pueden ayudar a reducir el trabajo, sobre todo si se trata de una empresa con una gran cantidad de papeleo.
En el mercado, existen diferentes tipos de sellos y en función de las necesidades que tenga la empresa será mejor escoger una alternativa u otra. Por ello, en el post de esta semana hablaremos de los diferentes tipos de sellos y para qué es mejor utilizarlos.
Sellos para oficina: ¿Cuál es el mejor?
Este tipo de sello conserva la esencia de los primeros y por ello cada vez que lo queremos utilizar es necesario entintarlo. Además, suelen durar más tiempo y con ellos decides la intensidad de tinta que quieres dejar en el papel. Todo esto hace que sean la mejor opción para firmas concretas que no necesitan ser utilizadas en el día a día.
En este caso el entintado de la matriz es constante y su comodidad, así como facilidad lo convierte en una alternativa perfecta para el día a día. Por otro lado, es más limpio que el manual ya que con su utilización no te manchas los dedos y evita que puedas emborronar o ensuciar el papel que estás sellando.
- Sello caucho
Es la mejor alternativa si lo que buscas es plasmar la firma de tu empresa en un documento importante, al cual quieres darle un toque de profesionalidad y distinción. Además, destacan por ofrecer una mayor resistencia de la impresión y por ser de mayor calidad.
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